“Slow Fashion”: Moda de calidad 100% sostenible
La producción industrial de ropa ha crecido de manera exponencial en los últimos treinta años. Como dato que justifica esta afirmación podemos fijarnos en el incremento de las mezclas de fibras sintéticas, que pasaron de seis millones de toneladas de poliéster en 1980, a suponer cien millones en el año 2015.
Este aumento de los tejidos plásticos viene marcado por la tendencia dominante en el mundo de la moda, llamada “fast fashion” (moda rápida). Durante décadas el sector industrial ha impulsado el atractivo por la ropa barata, producida en cantidades masivas gracias a estos materiales no orgánicos. Es por esto que en Baúl de Algodón apostamos por la “slow fashion” moda de calidad 100 sostenible.
El objetivo es hacer muchas prendas de forma rápida y barata, en perjuicio de la calidad de la ropa y de los trabajadores que la realizan. Es el modelo de negocio del mercantilismo con costes mínimos y amplios beneficios, que promueven un consumo desmedido e innecesario; además de suponer la segunda causa de contaminación en el planeta.

Sin embargo, el número de personas concienciadas de lo que significa la ropa barata y las modas breves está aumentando. Por lo que ha nacido otra tendencia que representa lo opuesto, se trata de la “moda lenta” o “slow fashion” también llamada moda etica y sostenible.
Se caracteriza por: utilizar materiales orgánicos y reciclados, realizar una confección artesanal y responsable, y emitir una huella de carbono mínima. Una de las principales características, a diferencia de la ropa industrial, es la calidad y durabilidad. Calidad que viene marcada desde la materia prima que se emplea, y por que la prenda no sufre los tratamientos de químicos (desgrasado, blanqueo y teñido).
Una breve comparativa nos permite ver las diferencias radicales de los dos modelos de producción textil.
FAST FASHION VS SLOW FASHION
-Producción masificada -Producción exclusiva y artesanal
-Baja calidad y poca durabilidad – Alta calidad y durabilidad
-Trabajadores explotados sin -Trabajadores formados con derechos
condiciones laborales
-Altas emisiones de CO2 y tóxicos en -Sin pesticidas ni químicos en la
todo el proceso producción
-Prendas contaminantes -Prendas orgánicas y biodegradables
-Desconocimiento del lugar de origen -Trazabilidad de la materia prima
de la materia prima
-Grandes superficies y cadenas – Pequeño comercio y redunda en la
comerciales economía local

Se trata de dos visiones totalmente distanciadas a la hora de concebir el mundo de la moda. Contrasta una obra
artesanal, única y duradera con otra prenda que concibe como una mercancía sin valor y de pobre calidad.
Es por eso que Baúl de Algodón apuesta por el “slow fashion”, una moda sostenible a nivel social y medioambiental.
Asimismo, os cuento que a partir de 2021, la destrucción de productos textiles no vendidos está prohibida y a partir de 2022 la recolección y recuperación de materiales textiles será obligatoria. Se hará mediante el reciclaje o reutilización. ¡ Vamos tomando conciencia!
Además, gracias al catálogo de la tienda oline, podrás adquirir y recibir los productos cómodamente desde tu casa.
Desde luego yo apuesto por la moda slow fashion por el bien nuestro y del planeta,queda mucho por hacer pero mediante la información,como la que proporcionais vosotros,se llega cada vez a concienciar a más gente para que apueste por este tipo de moda.Enhorabuena por el artículo!!
Gracias Mónica por tu comentario. Es verdad que queda mucho por hacer, pero se va ganando terreno y la sostenibilidad está llegando a tod@s. Con estos cuatro artículos seguimos dando información para que las personas vean que hay que hacer y se puede, las cosas de otra manera.
Muy interesante.
Ojalá empiece a calar hondo y nos concienciemos de que uno mismo puede contribuir, a pesar de que la industria todavía no apueste por ello como debiera
Hola Yolanda, estamos en ello y sí que cada uno puede empezar haciendo pequeños gestos para ir poco a poco a más. Hay grandes profesionales de la moda que están apostando por productos artesanales y sostenibles. El problema son las grandes cadenas que llevan las empresas a países menos desarrollados y utilizan a la gente inhumanamente para producir, producir y producir. Esto genera millones de toneladas de ropa. Por otro lado está el uso de pesticidas químicos y otras sustancias que se utilizan en la agricultura.
Da para mucho este tema. Muchas gracias por tu comentario.